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Colegiala después de dos años

  • anorexiasophi
  • 1 mar 2016
  • 2 Min. de lectura



Hoy después de dos años volví a ser colegiala, fui capaz de demostrarle a la anorexia que podía recuperar lo que me había quitado y así será con cada una de las cosas que me robo. Fui capaz de despertarme feliz consciente de que se venía un nuevo desafío, un desafío que postergue por miedo y preferí tomar otras decisiones, pero decisiones de las cuales no me arrepiento. Creo que hoy le di la mano a esos dos años de exámenes libres, le di la mano a uno de los mejores estados mentales que he tenido y creo que este era el momento, no antes ni después, era este año y ahora entiendo muchas cosas, me acuerdo lo mucho que me afecto el tener que dejar de ir al colegio, quería ser una niña corriente, poder hacer lo que hace una persona a mi edad o una persona cualquiera que puede ir a un colegio pero mi salud me lo impedía, llore mucho, me juzgue mucho, me sentía estúpida, quería aprender, pero en mis momentos de luz podía decirme a mí misma “todo lo que tiene que ser será, y todo llega en su momento” y les juro que fue así. Creo que el tiempo lo dice todo, estaba feliz, estaba feliz de que este día llegara, no me importa que el verano se acabe, mucho alegan por eso pero de verdad no se imaginan lo que es no haber podido ir al colegio en dos años y hoy haber tenido que levantarse, ponerse uniforme nuevo, tener cosquillas en la guata porque realmente no sabías a lo que ibas. Creo que veste tiempo me sirvió para hoy poder haber podido levantarme y poder haber tenido la madurez suficiente como para saber que quizás iba a ser raro contar lo que te está pasando pero al mismo tiempo entender que esto no te hace ni peor ni mejor simplemente diferente, realmente hacer que ellos me conozcan y que puedan ver que claro tengo un diagnostico pero que no soy eso, que soy mucho más que eso, que tengo sueños, que puedo ser buena onda, que puedo ser amiga y que además puedo ser compañera y creo que esa invitación tengo en mi cabeza para ellos, eso me ayuda a darme un poquito de confianza y quizás eso hace que me importe un poco menos quizás como se lo pueden tomar.

Hoy me levante con un nuevo desafío, otro más que me estaba presentando esta enfermedad pero si uno de los desafíos que más estaba esperando tener. Estaba feliz, nerviosa y ansiosa, me daba miedo el recibimiento, los cambios que significarían esto, y lo que podía pasar, pero como les dije antes era el momento de hacerlo. Fue raro, me recibieron bien y me gustó mucho mi nuevo colegio. Y de verdad que nose que más escribir y como expresar todo lo que siento es como felicidad, miedo, entusiasmo, nerviosismo pero todo eso me lleva al mismo objetivo que tengo clarísimo para este año.


 
 
 

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